lunes, 30 de noviembre de 2009

"Mi Dios no es mejor que el tuyo...es distinto"

[Escucharlo llorar por las noches nunca me hizo bien, pero sé que me ayudó a crecer y a comprender algunas cosas...lamento no entender tu dolor, pero _de una manera egoísta e insensible, ya sé_ me alegro de haber sabido guardar distancia...]

"Dicen que no me escuchas, pero voy a intentarlo de todos modos. Estoy seguro de que aún puedes oír aunque no sea del todo.

Según los seres de azúl _¿o es celeste?_, ya es tiempo de que te deje ir...pero estoy seguro de que esos hombres no entienden nuestra situación, ¿o sí?

No deberías haberte ido, en primera instancia... ¿no la pasábamos bien juntos? No teníamos plata ni un futuro académico, pero éramos felices... ¿Israel? Eso de verdad estaba fuera de nuestro alcance...

En segunda instancia... ¿la guerra? ¿Perdiste la razón? Además, ¿ese tipo de guerras? Ya sé que todas son malas...pero, ¡¿esa?! Sé que somos primos y que nada podrá hacer que por nuestras venas no corra la misma sangre, pero te aseguro que el tú que yo conocí nada tiene que ver con conflictos bélicos... ¡Y lo dice alguien que ha vivido contigo hasta odiarte! Odiarte desde un punto de vista no figurativo...

La tercera instancia, me imagino la conocerás... ¿Religiones? ¿Abandonarme por la religión de tus pares? Ni siquiera era la tuya... Alejarte miles de kilómetros para ir a hacer poses frente a miles de hipócritas... ¡Nadando entre hipocrecía! Y ayer también tú lo creías...

En fin...lamento lo que hayas visto, imagino que fue un infierno... ¿ejércitos luciferinos? ¿Y qué creías que eran los ejércitos? Están preparados para matar y, tú lo has dicho, eso, si es obra de algún inmortal, adjudicadlo a Lucifer, príncipe de todo mal.



Sin más preámbulos, por temor a que realmente, en algún momento, dejes de oír por completo, me limito a despedirme... Lo que tuvimos nunca fue mucho...a veces, ni jabón lográbamos comprar _armando motos no se gana tanto como se debería_, pero te aseguro que los años que compartimos parecen ser mejor que los que vivo ahora, que el jabón y la comida me sobran..

Salud, primo...y dejando atrás lo vivido, te saludo como si fuera un día normal...y me flagela no haber podido hacer algo más..."



La muerte no nos roba los seres amados.
Al contrario, nos los guarda
y nos los inmortaliza en el recuerdo.
La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente.

A menudo el sepulcro encierra, sin saberlo,
dos corazones en un mismo ataúd.
Texto por Poyo Skalari

sábado, 28 de noviembre de 2009

"es una música mágica que te alegra los días y despierta tu niño interior"

Una discusión de un niño y una bestia...una bestia con piernas, con brazos y piel...una bestia tan humana y tan irracional como cualquier otra...una bestia con un arma en el bolsillo.
Una discusión que se metía por las grietas de la mente de un soñador y en los surcos de la piel de un asesino...una discusión que como foco tenía a la vida, algo que ni el niño ni la bestia conocían realmente...
El niño revoleaba un cometa ideal utópico...la bestia se reservaba sus ideas...o tal vez ni siquiera las tenía...
El cometa voló muy alto...parecía más que un niño...tal vez fue eso lo que molestó a la bestia...darse cuenta que él era menos que un niño...tal vez fue eso lo que lo obligó a empuñar su arma...tal vez el culpable fue el niño y no la bestia...


Y entonces, en vez de bajar la mirada, la subieron, la levantaron bien alto, lo más alto que pudieron...
Se sintieron tristes, frustrados, iracundos...pero más que nada, orgullosos...Orgullosos porque lo conocieron, porque no se fue solo, porque no se fue infeliz, porque nunca fue pasivo...y siempre fue amigo de todos...
Iracundos, sí...porque fue injusto, porque fue uno más con esa historia, porque no había derecho...
Frustrados...porque era un niño, porque no pudieron hacer nada...porque todo estaba hecho... ¿O no?
Tristes, más que nada...porque se fue el mejor, porque se fue el más noble...el único digno...
¿Y la mirada? Alta, bien alta... Cada vez que levantaban una pancarta, cada vez que caminaban la calle, cada vez que en sus bocas se posaba el grito de "Libertad" o "A la memoria"...en cada uno de sus actos, el niño vive...el niño...el culpable o la víctima...
Sí...en sus pancartas, en sus caminatas callejeras, en sus cánticos...sí, allí vive el niño...



"_¿Una flor? Feliz día del niño...
_¿Me considera una niña?
_Cada uno de nosotros alberga
un niño y un policía...es necesario
que viva sólo uno...es necesario
que sea el niño..."


Para Lucrecia Bolado, alias Lux Bolado, por hacer que sea una niña por siempre; para el niño soñador, Alexandros Grigorópoulos, por revivirme...



Texto por Poyo Skalari

lunes, 23 de noviembre de 2009

016



¡Bum!
Y a veces pareciera que ese sonido no tiene nada que ver conmigo.
¡Bum!
Otra vez, ya ni siquiera me molesta…
Él me mira, yo lo miro. Creo que a ninguno de los dos nos gusta estar en esta situación.
¡Bum!
Es una melodía interminable. Se mete por los oídos y penetra la mente, alojándose como un parásito. Pero, reitero…ya ni siquiera me molesta.
¡Bum!
Suena como explosión metálica, como cadenas de ciclón agitándose con el viento. Y parece no tener nada que ver conmigo…
¡Bum!
Me siento de cabezas, aunque nada tiene que ver con la cadencia del sonido que ya se ha convertido en una armónica sinfonía. El olor es nauseabundo, pero no pienso irme a ningún lado. De a momentos, lo disfruto.
¡Bum!
Pareciera que el ruido lo altera. Está bien, estamos a mano. Él me ha atormentado toda la vida.
¡Bum!
El llanto es algo que odio. No sirve para nada y nos muestra vulnerables. No sé por qué él llora ahora.
¡Bum!
Lo siento…pero ya no tolero verlo…
¡Bum!
Ya no tolero que me vea…
¡Bum!
Otra vez…siento que nunca lo he tolerado… Pero debo admitir que ahora se siente mejor…debo admitir que prefiero que él esté en el suelo y no yo.
¡Bum!
Lo siento, pero ya no seré blanco de mentiras…ya no soportaré ser víctima de nada…
¡Bum!
Lo siento, de nuevo…pero me alegro de que la bala ahora esté en tu cuerpo…y no en el mío.
¡Bum!
Lo siento…pero me siento bien… ♥



"Mientras la ley no te quiera escuchar y siga dormido ese juez
Mientras el mundo no quiera cambiar, autodefensa mujer.
Enséñale los dientes, mujer"

"No te golpea por ser alta o baja, gorda o flaca, necia o inteligente, licenciada o analfabeta… te golpea por ser mujer"

Texto por Poyo Skalari

sábado, 21 de noviembre de 2009

La música medicina es para mí

Con la navaja hecha pedazos se digna a cortarla en cuatro, cinco, no… ¡Seis trazos! La vigilia le molesta y prefiere no perder el tiempo durmiendo, por más que el cuerpo se desarme por el maltrato.

Se agacha y enrolla uno que acaba de cobrar. A veces se siente un fracasado _tal vez porque lo es_ y sólo la mezcla con agua para que la nariz no duela ni sangre.


Ella lo mira desde la otra silla. Llora. Lo ama… Él no sólo no la quiere. Ya la odia.

_¿Lo harás de todas formas? ¿Aunque yo te pida lo contrario?

_Lo hago desde antes de conocerte…

Ella siguió hablando, pero nada de lo que pudiera decir le importaba. Ella había engordado, se había rapado, hace meses que le había empezado a repugnar.

Acercó el cilindro que acababa de enrollar a la mesa. Allí estaban las seis líneas malditas que marcaban, con algo de simbolismo _y si se puede, surrealismo también_, la división entre la vida y la muerte, lo bueno y lo malo, lo vivido y lo futuro…sin saber nunca qué lado era cuál. Maldita hada blanca...

Antes de respirar, levantó la vista. Desde la pared, lo miraba aquel hombre de pelo largo que decía ser, nada más y nada menos, el hijo de Dios…por suerte, era sólo un cuadro. Pero eso bastaba para sonrojarse y enfadarse consigo mismo.

_¿Qué diría tu dios?

“¿Mi dios? ¿Tengo uno?” Todo lo que ella decía hacía que él la odiara aún más.

La música sonaba detrás. “Sweet Jane” derretía los parlantes. Eso era lo único que había
impedido que las líneas no fueran veinte y fueran sólo seis. La música era el único verdadero remedio…las líneas, un macabro placebo…

Volvió al cuadro, luego a ella luego a la mesa.

_Mi dios ya no me habla…

Y aspiró enérgicamente.

"La cocaína no crea hábito. Debo saberlo - La he estado tomando durante años."

Texto por Poyo Skalari

lunes, 16 de noviembre de 2009

Nada es para mí

Claro...y así librarse de toda culpa, de toda frustración o desconsuelo...
"Sí, me arrepiento."
Sí, se arrepiente y olvida todo. Se arrepiente y no le importa nada...ni nadie.
Se olvida, me olvida, nos olvida...y a veces parece que todo fue ayer...pero ¿qué todo? si no pasó nada de nada...las marcas son ficticias, tanto las físicas como las mentales...aunque a mí me parezcan tan reales...
Sí, yo también me arrepiento de eso que no fue nada...aunque antes acepto que haya sido la mejor nada de mi vida...y la mejor de los todos también...
Como vos, me dispongo a olvidar...aunque ciertamente olvidarme constituya la peor acción de cualquier tiempo...como olvidarse del sentido de las cosas...
"Así vamos a poder seguir con nuestras vidas...así nada interfiere en ningún lado"
¿Pero qué vida, si lo que le ha aportado felicidad debe ser olvidado? Aúnque de ello ya no quede nada...o siempre haya sido nada...
¿Y entonces? Y entonces nada...me alegro de lo pasado y me lo olvido. Algunos dicen que recordar nos ata al pasado...otros que olvidar nos condena a equivocarnos eternamente, como si todo lo vivido haya sido malo. Ojalá esta nada no forme parte de ninguna de las dos posturas... Ja...obviamente, si nada es.
Pero donde hay nada tiene que haber algo, ¿no? No, no. Él se refiere a la nada por definición. Él dice que no pasó nada, que nunca hubo nada _y ese nada no es algo_. Pero ese nada para mí fue todo...
En fin, los algos, los todos y los nadas se parecen ultimamente...
De todas maneras, me arrepiento de...eso _que puede ser un algo, un todo o una nada, dependiendo de quien lo mire_. No por el eso en sí, sino por haber compartido el eso con una persona tan superficial.
Gracias por algo, por todo o por nada. A veces hasta suenan igual en mi cabeza... "algo, todo o nada".
Todo cambia nada es. No lo dije yo eh...
"Querete, cuidate..." Más tierno...pero olvidate, él se arrepiente y se olvida.
¿Y como posdata? Como posdata, que lo felicito, que me encantaría ser como él...arrepentirme y olvidarme. Ser tan fría que nada me toque, que no haya "nada vivo dentro de mí". E informarle que todos los días me voy a dormir pensando en cómo puedo ser realmente una verdadera Escapista.

Texto por Poyo Skalari

domingo, 15 de noviembre de 2009

¿Puedo volver al ajedrez?

Tampoco olvido que, pegado a la persiana, oí morir a un conscripto de la calle y ese hombre no dijo: "Viva la patria" sino que dijo: "No me dejen solo, hijos de puta".
Después no quiero recordar más, ni la vos del locutor a la madrugada anunciando que dieciocho civiles han sido ejecutados en Lanús, ni la ola de sangre que anega al país hasta la muerte de Valle. Tengo demasiado para una sola noche. Valle no me interesa. Perón no me interesa, la revolución no me interesa. ¿Puedo volver al ajedrez?



Fragmento de "Operación Masacre" de Rodolfo Walsh

sábado, 14 de noviembre de 2009

EVA



Eva no quiere ser para Adán
la paridora pagada con pan.
Eva prefiere también parir,
pero después escoger donde ir.
Por eso adquiere un semental
y le da uso sin dudas normal.
Eva cambio la señal.

Eva sale a cazar en celo
Eva sale a buscar semillas
Eva sale y remonta vuelo
Eva deja de ser costilla

Eva no intenta vestir de tul,

Eva no cree en un príncipe azul.
Eva no inventa falso papel
el fruto es suyo con padre o sin él.
Eva se enfrenta al que dirán
firme al timón como buen capitán
y encoge hombros Adán.






"Eva" por Silvio Rodriguez

martes, 10 de noviembre de 2009

De todas maneras, toten hosen... ♥

Él miraba de lejos. Yo trataba de visualizarlo en mi mente, pero era tan tentador que me obligaba a clavar mi vista en él.
La noche acababa de empezar pero ambos sabíamos que lo que esperábamos no empezaría hasta dentro de unas dos o tres horas.
Ya habían tocado dos bandas y se estaba preparando la tercera que prometía rasgar la tierra. Sin embargo, yo no la esperaba, y estaba segura de que él tampoco.
En un momento, el arremetió contra el humo que se ubicaba delante de él, formando una nube, avanzó hacia mí y se sentó a mi lado, con poco ánimo de emitir una larga conversación.
_ ¿Un cigarro? _dijo casi inentendible por el poco español que sabía_.
"Alemán."
_Justo lo que quería _y recibí la droga contenta_.
Saqué un encendedor del bolsillo y prendí el suyo. Luego lo acerqué a mi boca y encendí la punta del mío.
Estoy segura que él al menos era diez años mayor, pero no me importaba. Como él no había ninguno en este pozo. Todavía me costaba entender cómo alguien como él haya elegido visitar un lugar tan deprimente como lo era éste.
A los cinco minutos, nuestros cigarros estaban prácticamente extintos y en todo el tiempo ni siquiera nos habíamos vuelto a mirar.
_ ¿Has disfrutado mi droga?
Asentí con la cabeza. Su español era pésimo.
Se acercó a mí, besó mi mejilla y se puso de pie.
_Disfruta ahora el concierto...
Me dio la espalda y caminó al centro de la pista para perderse en la inmensidad de la masa que saltaba vivamente.

Es triste querer ver el mar y no ver la luna...a veces creo que en verdad no lo vi, que él sólo es un personaje ficticio inventado por mi embustera enfermedad...pero otras veces me convenzo diciendo lo contrario...una criatura tan perfecta no puede ser el producto de una mente tan corrompida...