jueves, 28 de octubre de 2010

Delirium tremens

No me gusta la rutina, me da miedo el miedo y el café. Los cigarrillos sueltos me dan asco y las personas lindas me dan pena cuando lloran. Me da vergüenza ser muy flaca, tengo todo para dar. Desconfío de la vida y del andar, me molestan los caminos, no me quiero encasillar en ningún lugar.
Sueño sueños imposibles, pienso pensamientos impensables y me da angustia no mirar. Imagino realidades inherentes, me siento un sujeto transparente.
Me angustia no entender que no existe todo, no me gusta tu forma de actuar ni tu cara de informado. A veces me da miedo que no existas, que seas otro objeto del delirio tremendo o de una mente sin remedio. Tengo sueños incoherentes y una familia sin amigos.


"Te pido que existas y, sino, que el delirio sea eterno."

Versión de lo que escribió el Mariscal por la Poyo Skalari